Feliz año 2008 y "Los Otros Kunta Kintes"

Hola querido y estimado lector.

Antes de nada quería pedirte perdón por estos meses de completo silencio, llevaba nada menos que desde el 11 de septiembre sin escribir nada. Y es que apesar de que han sido muchas las ideas que bullían en mi cabeza, pocos han sido los momentos en que he tenido ocasión de sentarme a plasmarlos en este blog. Por otro lado, las veces que lo he intentado he tenido la desagradable sensación de haber sido abandonado por aquello que llaman las musas o la inspiración. En fin, espero tener más tiempo durante este año 2008 y continuar con mis historietas ya que sé que de vez en cuando te pasas por este rincón para ver si hay algo nuevo que leer.

Quiero también desearte que el nuevo año te sea muy propicio para todo aquello que emprendas y que tengas mucha suerte durante todo el 2008.

Además quiero regalarte, sin más preámbulos, para que empieces el año con algo que leer está nueva reflexión titulada:

"Los Otros Kunta Kintes"

Viendo el otro día por enésima vez la serie Raices enterita, me dí cuenta de que siempre lloro y sufro en los mismos momentos. Cuando los negreros raptan al joven Kunta de su selva natal en África en 1767, cuando le obligan a decir a base de latigazos que su nombre es Toby, cuando le cortan el pie en su segundo intento de huída y cuando venden a su hija Kissi a otro massa y se la llevan de la plantación separandolo de su descendencia para siempre.

Sin embargo Kunta Kinte siempre quiso ser libre porqué asi había nacido y aunque él no lo consiguió jamás si supo transmitir lo que significaba la libertad a su hija hablándole de África, de la selva y enseñandole las palabras del pueblo mandinga. Así le enseño que "koo" significa sol y que "Kambi Bolongo" significa río. Kissi se lo contó a su hijo George "El Gallo George" que ya anciano consiguió la ansiada libertad para él y para sus hijos, a los que también explicó la historia de su abuelo y el significado de las palabras mandinga.

Cuando terminó la serie, me dió por reflexionar sobre lo duras que debieron ser las condiciones de vida de aquellos esclavos africanos y pensé en lo bueno que es la libertad, el ser libre. Entonces me di cuenta de que aunque me considero libre comparado con Kunta Kinte, hay algo que no va bien en mi libertad, quizá no soy tan libre como creo y eso que nunca me he casado.

Pero no es el noviazgo o el matrimonio lo que nos quita la libertad y nos convierte en esclavos de por vida, ni siquiera es el tener hijos (veo a mis amigos con cara de encantados con sus hijitos hasta cuando les limpian los mocos). No, no es nada de eso. La verdadera esclavitud del hombre moderno occidental desarrollado y teorícamente libre, empieza cuando uno cruza la puerta de un banco para pedir una hipoteca y comprarse un piso. En ese momento estas perdido.

Tu pasas por la puerta y dices: - Buenos dias, vengo a pedir una hipoteca. Te presentan enseguida al director de la oficina que sonriendo te hace pasar a su despacho para hablarte de numeros, siglas y comisiones en un lenguaje que tu no entiendes. Me siento igual que Kunta Kinte cuando llega a Tenesse(EEUU) y no sabe hablar inglés mientras los Massas(Amos) deciden su futuro en ese idioma.

Poco a poco te van hablando de los latigazos que te van a dar para que te aplaques y transijas...se llaman comisiones. El objetivo siempre es que te den los menos latigazos posibles es decir las comisiones más bajas. A Kunta Kinte le dieron 20 para que dijera que se llamaba Toby. Tú dirias que te llamas Ambrosio si con ello te dejaran las comisiones a 0.

Luego te van a hablar de las cadenas y grilletes que te acompañaran de por vida se llaman el Euribor y la Cuota. De esos no te vas a librar jamás. Pero el objetivo aquí es conseguir que sean lo menos pesadas posibles, aunque siempre te van a pesar un montón.

Te crees libre porque puedes elegir el banco, es cierto. Kunta Kinte no pudo elegir el Massa que lo compró, en cambio yo puedo elegir mi Banco. Lo malo es que no había un Massa bueno, eran todos igual de hijos de la gran puta y lo mismo ocurre con los bancos. Massa Santander, Massa La caixa, Massa Pastor...que más dará.

Bien ya has elegido un banco y estás supercontento porque te concede la hipóteca, que es igual que decir que te deja ser su esclavo para toda la vida y tú tan contento. Ahora sólo queda trabajar durante toda tu vida para conseguir la libertad y que te quiten las cadenas. Si trabajas duro igual puedes amortizar capital y comprar tu mismo esa libertad, sino en el mejor de los casos cuando peines canas, a los 60 años pagarás la última cuota a tu Massa, a ese Massa que elegiste cuando aún te creías un hombre libre. También hay gente que muere sin poder comprar su libertad.

En Raices, se ve como hay unos esclavos que viven un poco mejor, porque son esclavos de confianza. Tienen un techo donde dormir, comida caliente a diario y algún que otro privilegio. Si, si, igual que los trabajadores de los Bancos tienen Euribor menos cierto diferencial. Así los trabajadores de los Bancos son los esclavos de confianza de los Massa Bancos.

Por cierto, si intentas escapar de tu esclavitud no pagando al Banco...quizá no te van a cortar el pie...pero te quitarán tu casa. No quiero entrar en disertaciones sobre que método es más cruel, simplemente el de despojarte de todo es un método más moderno para mantener el miedo en tu cuerpo.

Así que, visto lo visto, no soy tan libre como creía...¿o todavía no has visto el paralelismo entre Kunta Kinte y el llamado "propietario" de un piso actual?.

Lo que me sabe peor de todo esto es que, al no ser mandinga, no podré enseñarles a mis hijos que "Koo" significa Sol y "Kambi Bolongo" significa río.

Feliz año 2008 a pesar de todo.